El hecho de creer en la dominación femenina y de ser feliz teniendo a mi novia como una diosa me da cierto derecho a poder opinar sobre el tema de la igualdad de sexos sin miedo a que se me tache de machista. Y si me tachan me da igual, la verdad.
Vamos a aclarar una cosa de entrada: La igualdad entre el hombre y la mujer es una estupidez supina. Recomponeos las rasgadas vestiduras y seguid leyendo.
Hombres y mujeres somos diferentes ¡Y menos mal! Si todas las mujeres fuesen como los hombres me pegaría un tiro sin dudarlo. Y es que hay que distinguir igualdad de derechos con plagio de todas als facetas.
Y aquí es donde estamos de acuerdo. Evidentemente sí a la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Lo contrario sólo lo dicen los salvajes retrógrados y los musulmanes (aún recuerdo el panfleto de un imán de Granada sobre cómo pegarle a tu esposa...).
Pero ojo, que no todo el monte es orégano. La discriminación positiva que parece poco menos que aberrante. Por muy positiva que sea, ¡es una discriminación! Las leyes de paridad me parecen insultantes para las mujeres y absurdas. Por ejemplo, a día de hoy la mayoría de los estudiantes de Farmacia son mujeres. ¿Supone eso que, por paridad, todos los hombres van a ser contratados aunque sean peores que muchas mujeres?.
Y qué decir del tema del abuso sexual y el maltrato. Es un tema muy serio que muchas mujeres, con denuncias falsas por rencor trivializan y deslegitiman.
Me saca de quicio la manía de los direntes gobiernos (nacional, regional, local) de asexualizar nuestra condición. Quieren que no haya hombres y mujeres, sino ciudadanos uniformes. El otro día pude leer un folleto de bibliotecas municipales en que todas las actividades iban enfocadas a que las niñas no pensaran en princesas y vestidos ¿Pero qué os pasa? Claro que una mujer puede hacer cualquier trabajo, pero no mezclamos las churras con las merinas.
Negar que somos, afortunadamente, diferentes es una aberración tan grande como maltratar a una mujer.
Vamos a aclarar una cosa de entrada: La igualdad entre el hombre y la mujer es una estupidez supina. Recomponeos las rasgadas vestiduras y seguid leyendo.
Hombres y mujeres somos diferentes ¡Y menos mal! Si todas las mujeres fuesen como los hombres me pegaría un tiro sin dudarlo. Y es que hay que distinguir igualdad de derechos con plagio de todas als facetas.
Y aquí es donde estamos de acuerdo. Evidentemente sí a la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Lo contrario sólo lo dicen los salvajes retrógrados y los musulmanes (aún recuerdo el panfleto de un imán de Granada sobre cómo pegarle a tu esposa...).
Pero ojo, que no todo el monte es orégano. La discriminación positiva que parece poco menos que aberrante. Por muy positiva que sea, ¡es una discriminación! Las leyes de paridad me parecen insultantes para las mujeres y absurdas. Por ejemplo, a día de hoy la mayoría de los estudiantes de Farmacia son mujeres. ¿Supone eso que, por paridad, todos los hombres van a ser contratados aunque sean peores que muchas mujeres?.
Y qué decir del tema del abuso sexual y el maltrato. Es un tema muy serio que muchas mujeres, con denuncias falsas por rencor trivializan y deslegitiman.
Me saca de quicio la manía de los direntes gobiernos (nacional, regional, local) de asexualizar nuestra condición. Quieren que no haya hombres y mujeres, sino ciudadanos uniformes. El otro día pude leer un folleto de bibliotecas municipales en que todas las actividades iban enfocadas a que las niñas no pensaran en princesas y vestidos ¿Pero qué os pasa? Claro que una mujer puede hacer cualquier trabajo, pero no mezclamos las churras con las merinas.
Negar que somos, afortunadamente, diferentes es una aberración tan grande como maltratar a una mujer.
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